Por Miguel Ángel Cid Cid
Pero Santiago y el Cibao
esperaron, reclamaron, rogaron para que el Festival del Teatro se celebrará en
esta importante plaza cultual. Tuvo que desaparecer por siete años. Siete años
que, parece fueron la garantía de una reflexión dilatada de las autoridades de
cultura.
Milagros German, ministra de
Cultura, se mudó a la ciudad Corazón para dirigir paso a paso el desarrollo del
“FITERD2023”, logotipo del Festival. El programa se inició el viernes 20 recién
pasado en el Centro de la Cultura Ercilia Pepín y concluirá el próximo 30 de
octubre en el Gran Teatro del Cibao.
La inauguración del Festival
la encabezó la ministra German y Giovanny Cruz, viceministro de Participación
Popular del Ministerio de Cultura. Luego de la apertura formal se presentó la
obra Al Pie del Támesis, del Teatro Avante, Estados Unidos.
Colombia es el país invitado
de honor al festejo sobre las tablas santiagueras. La Corporación Cultural y
Artística Teatriados y en especial, el Colectivo Teatral Matacandelas
representan a Colombia.
El XI Festival de Teatro,
dedicado a nivel internacional a Mario Ernesto Sánchez, director del Teatro
Avante, Miami, Estados Unidos. En el ámbito local, la dedicatoria recae sobre
Karina Noble, reconocida actriz dominicana.
Santiago de los Caballeros, es
la cede del Festival. Pero al Cibao le toca su cuota. Las presentaciones se
distribuyeron en las principales salas de varias ciudades cibaeñas. San José de
las Matas, Santiago y Bonao.
Es de sabios respetar a los
contrarios, nunca avasallar. Por la
salud del festejo, por el avance del teatro, la cultura del interior quedó
guardando la cordura. Para evitar contagios se incluyeron algunas salas de
Santo Domingo.
El telón se abrió cerca de sesenta
veces para dar paso a los artistas escénicos de Colombia, Estados Unidos,
España, Argentina, México, Perú y República Dominicana. Los grupos presentados —además
de los citados arriba— son: Producciones Raúl Méndez, Franklin Soto Presenta, el
Teatro Utopía y la Dirección de Cultura Dominicana en N.Y.
Se incluyen, además, la Compañía
Nacional de Teatro, el Teatro Popular del Centro (TPC), el Aguijón Theater, el Teatro
de Improvisación Espontaneo, el Teatro Rodante Dominicano, Capitán Corchea, el Teatro
Guloya, Coturno Teatro y Producciones Quemando.
La lista anterior —aunque
suelen ser odiosas— es un indicador de que el
derroche de actores, actrices y directores teatrales ha sido descomunal. Pero
el público participante no se queda atrás. En la mayoría de las puestas en
escenas, los auditorios lucían abarrotados de bote en bote.
En lo que va de artículo
pare que las loas son exclusivas para la Diva, como suelen decirle a la
ministra German. Y no se equivocan. Porque los que los ministros que la
antecedieron ni siquiera por asomo se les ocurrió traer a Santiago la más importante
fiesta teatral.
Hay, sin embargo, otro
funcionario que, sin desmeritar a la ministra, trabajó con empeño para
sobreponerse a los obstáculos del momento. Él se enfocó en hacer del evento un
faro reluciente en medio de la oscuridad. Hablo de Robinson Aybar, director del
Centro de la Cultura Ercilia Pepín. Su trabajo de anfitrión fue notorio, a
pesar de que el edificio del Centro está siendo remozado.
Robinson se movía entre el
auditorio, el escenario y los pasillos del Centro de la Cultura como si
estuviera representando una obra de pantomima. Modelaba cada movimiento con sigilo
y precisión perfectas para que todo saliera a pedir de boca.
Con todo, ahora se sabe —lo
demostró el FITERD2023— que siete años de
meditación son suficientes para caer en la cuenta de que Santiago y el Cibao
también existen.
Por fin llegó el festival en
la versión número once.
ResponderEliminarIr a un show de stand up es una experiencia de risas garantizadas. Los comediantes ofrecen humor fresco y perspicaz, creando momentos de alegría y diversión para el público.