Por Miguel Ángel Cid Cid
La tradición
indica que escoger el candidato del PLD a la Presidencia de la República
siempre ha sido un clavo “pasao”.
Para las elecciones venideras las cosas se complican, Danilo quiere un delfín y
Leonel quiere ser él a troche y moche.
Las mayores
posibilidades de que el peledeismo continúe en el poder residen en el actual
Presidente Medina. Para que fuera Danilo era imprescindible reformar la Constitución
y restablecer la reelección presidencial. No obstante, la reforma se hizo
imposible porque Leonel Fernández decidió ponerle un candado grande sin saber
dónde tenía las llaves para abrirlo en caso de emergencia.
El mandatario
Danilo Medina intentó abrir los candados con otros métodos. “Dao al pecao” pronunció un discurso y
dijo: no voy y escogeré un delfín para vencer el León.
Por otro lado,
Leonel y su gente celebró que el Comité Central lo confirmara como
precandidato. Al ver la algarabía muchos creyeron que los demás fueron
rechazados y no fue así. Además del León hay 10 aspirantes más que también
fueron aceptados como competidores oficiales en las primarias internas.
El regocijo del
León al ser confirmado como precandidato fue tal que de inmediato propuso a
Reynaldo convocar una reunión del Comité Político. El encuentro del CP era para
discutir quienes serían los presidentes del Senado y la Cámara de Diputados. En
realidad la intención de Leonel era forzar la elección de Demóstenes Martínez
como presidente de los diputados en función de un acuerdo anterior.
En la selva de
cemento la palabra del rey vale poco. El Comité Político le hizo el caso el
perro al León y parece que tendrá que rugir bien fuerte.
¿Después de los
piquetes frente al Congreso de verdad los leonelistas creyeron que le darían la
presidencia de los diputados así por así?
De su lado el
resto de los precandidatos libran una lucha sin cuartel en pro de que el
Presidente Medina los escoja como su delfín.
¿Cuál será el
escogido para derrotar a Leonel Fernández en las elecciones interna de los
morados?
Lo cierto es que
la simpatía de los aspirantes del PLD es escasa. Se suma a la impopularidad la
alta tasa de rechazo que les acompaña. El caso de Fernández es muy especial,
luego de creerse que el poseía el aureola de un ángel ahora resulta que el
brillo se torna opaco. Entre todos los aspirantes el expresidente es probablemente
el más rechazado.
¿Entonces, cuál
podría ser la tabla de salvación del PLD con miras a las elecciones del 2020?
Desde mi óptica
de lego en asuntos peledeistas creo que Margarita Cedeño de Fernández se erige
en la ficha clave del PLD en esta coyuntura electoral. Los altos dirigentes
morados podrán resaltar argumentos débiles y de carácter machista para rechazar
su postulación. Ahora, la hoja de servicio de Margó la ponen en la diana.
Iniciemos por
decir que es la esposa del expresidente Leonel Fernández lo que le dio la
condición automática de Primera Dama. En consecuencia, resulta contraproducente
que Leonel ni siquiera la menciona y mucho menos pensar que depondrá su ambición.
Para el 2020
Margarita tendrá 8 años como Vicepresidenta de la República engullendo toda la
experiencia de Danilo Medina. Lo mejor de la vice es la popularidad que tiene
entre los sectores de clase media baja y entre las mujeres. De más está
resaltar que la tasa de rechazo de Margó es casi insignificante.
Si se escoge a
Margarita Cedeño de Fernández gana Leonel por ser su esposo y de paso sería el
Primer “Damo” de la república, gana
Danilo y gana el partido. El que más gana es el país que podría tener por
primera vez una mujer presidenta.
Siendo así ¿Por
qué Leonel, Danilo y el Comité Político del PLD no asumen el reto y en vez de
un delfín apoyan un águila cargada de sangre nueva?
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