Por Delcio Antonio Pérez
Frente a la situación de grandes dificultades que vive el
país, el sentido común, recomienda que sólo la unidad de todos los sectores
afectados por las barbaridades cometidas por la banda gobernante puede
enfrentar con posibilidades de éxito rotundo la mafia PLD.
Hablamos de sentido común, no de buen juicio, porque
resulta que el sentido común, pese a ser el más elemental de todos los sentidos
es el más escasos. De ahí
que muchos con disfraz de oposición radical, con su sectarismo y radicalismo
verbal le hagan el juego al gobierno, por carecer de sentido común y no
entender cuál es el blanco principal en cada coyuntura.
Si tuviéramos sentido común no cometiéramos tantos desaciertos como es el
de negar , torpedear o asumir con desgano la política de una amplia unidad
nacional opositora para sacar del gobierno la banda mora encabezada por Danilo
Medina y Leonel Fernández.
La crisis que atraviesa el país es tan diversa, grave y profunda que exige
de mucha compresión tolerancia, desprendimiento, entrega y que se pongan los
intereses del país en primer lugar, para hacer realidad esa amplia unidad que
el momento demanda y se necesita para sacar del gobierno a este grupo diabólico
y orientar el país por la senda del desarrollo, el progreso, el crecimiento
económico con rostro humano, la justicia social y económica, la transparencia
administrativa y la paz con pan.
Motivado en esa realidad la unidad entre los partidos no es suficiente por
lo que se hace necesario que esta abarque a todos los sectores de la sociedad
que tienen consciencia de que la Patria y la estabilidad democrática del país
están en peligro con la continuidad de esos depredadores morao al frente de los
destinos del país.
No estamos hablando de función ni de que usted se junte con el que no
quieres, estamos hablando de unidad coyuntural en base a objetivos y propósitos
comunes de interés social y colectivo que sería el un programa mínimo para la
unidad opositora. Para entender esto sólo se necesita de sentido común y poner
los intereses del pueblo Dominicano en primer plano.
Hay que impulsar la unidad amplia opositora más allá de los partidos y
movimientos partidarios. Se debe dar un paso al frente y trabajar para ello,
pero ahora, ya que ahorita puede resultar demasiado tarde para esta coyuntura. No
hay tiempo que perder.
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