Por Miguel Cruz Tejada
NUEVA YORK._ Manolo Sosa, un
dominicano presunto traficante de heroína, usando una cédula dominicana de la
Junta Central Electoral (JCE), y varios sobrenombres, fue arrestado por
policías en Methuen (Massachusetts), con 31 gramos de heroína, $9.200 dólares
en efectivo y una pistola, que transportaba en un taxi.
La policía dijo que Sosa,
fue detenido el miércoles de la semana pasada en la noche, después de que se
recibieron reportes al 911 sobre disparos hechos en el área de Andover.
Sosa, de 45 años, de edad y
residente en la calle Spruce, fue dejado preso y el juez le impuso una fianza
de $200.000 dólares después de su procesamiento por un cargo de tráfico de
heroína en la corte del distrito de Lawrence el jueves.
Los detectives utilizaron
una base de datos de huellas dactilares a través de la Oficina Federal de
Investigaciones (FBI) para identificar a Sosa, quien llevaba una tarjeta o
cédula de la JCE de identificación de la República Dominicana en la que aparece
con el nombre de Rafael Antonio Beltré Nieves,
según la policía.
Una orden de arresto pesaba
contra él, pero emitida a otro de sus nombres, Juan de León, por tráfico de heroína.
Sosa también había sido
previamente arrestado en el Departamento de Policía de Lawrence bajo el nombre
Juan de León.
Pero usando la base de datos
del FBI, los detectives llegaron a través del alias que tiene en la cédula de
la JCE, a su verdadero nombre, que es
Manolo Sosa, y la evidencia fue registrada bajo ese nombre.
Las autoridades no
especificaron el estatus migratorio de Sosa.
Fue arrestado después que la
policía recibiera un reporte a las 5:30 de la tarde del miércoles, alertando respecto
a los balazos disparados en la esquina
de las calles Essex y Franklin.
A la policía se le dijo que
alguien viajando en una furgoneta azul que abrió la puerta de un lado, hizo
varios disparos desde la parte trasera de ese vehículo.
El agente Claudio Camacho
inicialmente persiguió la camioneta, pero el conductor se alejó por la calle Essex hacia Broadway. Cuando el apoyo llegó,
la camioneta fue interceptada de nuevo
frente al edificio 572 de la calle Essex.
"La parada fue tratada
como una violación de delito mayor y todos los oficiales y detectives tenían sus
armas en las manos.
Sosa estaba sentado en el
asiento trasero detrás de la silla del pasajero. La policía dijo que además encontró tres teléfonos celulares
iPhone en el bolsillo delantero de los pantalones de Sosa, y una bolsa de plástico redonda que con heroína.
Los oficiales también
encontraron una gran cantidad de dinero en efectivo en la parte trasera de la
furgoneta al lado de donde Sosa estaba sentado, según el informe.
En ese momento la policía se
enteró que la furgoneta, pertenecía a una base de taxi en Andover, aunque no
llevaba el distintivo.
Los oficiales trataron de
hablar con Sosa, pero pidió un abogado y rehusó conversar con los policías.
La furgoneta fue remolcada y
confiscada.
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