Puntos oscuros de la marcha de Nueva York


Por Víctor Gómez

NUEVA YORK.-  Cuando se supo que en esta ciudad se iba a realizar una marcha igual a la que se realizaría en la República Dominicana en contra de la impunidad, tuve mis dudas sobre si participar activa o pasivamente porque no estaba claro sobre quién o quiénes eran los organizadores a tan importante convocatoria, al fin mi conciencia me dijo: “No marches y apóyala desde tu ventana óptica".

Así lo hice y no me arrepiento de no convertirme en un "Borrego"  más de aquellos que los políticos del patio, tienen acostumbrado a muchos aquí en la diáspora cuando quieren capitalizar, muchas veces valiéndose del dolor ajeno o siendo oportunistas para buscar cámara  y aprovechar la coyuntura y salir del anonimato o en otros casos darse  a conocer en el medio.

Traigo esto a la palestra pública a propósito de ver en los medios audiovisuales, dos figuras muy conocidas por la gran mayoría de los dominicanos, como son el nieto del hombre más criminal que ha parido la patria Duarte, como lo fue Rafael Leónidas Trujillo Molina, estamos citando a Ramfis Domínguez Trujillo y la otra "Perla"  que nos deshonró con marchar lo fue, el ex general Rafael Percival Peña, de quien muchos nos preguntamos, cómo y por qué lo dejaron entrar a los Estados Unidos, después de los escándalos que sobre él pesan.

Hoy mi conciencia está tranquila al saber que no me cogieron de tonto útil, de una marcha qué, aunque no deja de tener su razón de ser, aún no me convence porque nadie sabe  a ciencia cierta, quien la organizó y la financió, porque todos los partidos conocidos en esta urbe, querían tener protagonismo y se atribuyeron su "Triunfo".

Muchos de los dominicano de la diáspora que hemos vivido por más de una décadas en esta urbe, estamos convencido de lo que significamos  nosotros para los políticos que hemos tenido desde hace 50 años a la fecha, teniendo cada partido un representante a la cabeza que solo busca llegar para ser  "Más de lo mismo", porque ni siquiera  se pueden llamar de oposición ya que como bien se sabe son corporaciones al servicio del Sistema a conveniencia de algunos.

Tanto fue el cacareo de esta convocatoria, que al final se contaminó de una forma tan vulgar y pueblerina que ya vieron que estaban juntos y reburujados donde no se sabía con claridad, cuál era el objetivo de la misma porque todos los que se expresaron por los medios, decían cuanta cosas le venían a la cabeza, sin que se le entendiera con claridad que era lo que se perseguía en verdad.

Cuanto me gustaría que en un próximo llamado que se le haga a la comunidad allende los mares, se convoque teniendo un cedazo en mente, para que personajes como los antes señalados no se cuelen tan fácilmente o en su defecto tener control sobre ellos para que no se llegue a creer que los mismos son protagonistas de la convocatoria, como se llego a pensar en el caso que nos ocupa. 

El autor es periodista y locutor residente en nueva york.


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